Este caso es considerado uno de los
informes de ovnis clásicos y era uno de los mejores incidentes autentificados
de un encuentro cercano en la Europa continental, que no sólo se incluían
evidencias de huellas físicas, datos botánicos y datos fisiológicos, sino
también había descripciones detalladas de los seres asociados con el ovni. Este
incidente llegó a ser conocido como "El caso Valensole". No sólo
porque fue uno de los más investigados a fondo por investigadores privados de
ovnis en la historia, sino que también fue investigado por agencias del
gobierno francés desde el mismo día del evento.

El siguiente avistamiento ovni y de
extraterrestres se produjo en un campo de lavanda cerca del pueblo de
Valensole, ubicado en Alpes de Alta Provenza, en el sur de Francia.
El 01 de julio de 1965, a eso de las
5:45 am (05.45 horas), el agricultor de lavanda francés de 41 años, Maurice
Masse, fumaba un cigarrillo cuando estaba a punto de encender su tractor que
estaba estacionado detrás de una pila de piedras cerca de dos metros de altura,
cuando de repente escuchó un silbido que se extendió por toda la zona.

Desde ese lugar no podía ver lo que era,
pero creyendo que podría
ser un helicóptero militar haciendo un aterrizaje sin
autorización en su propiedad, decidió dirigirse hacia el origen del sonido.
Cuando salió de detrás de la pila de piedras, se asombró al encontrar un objeto
extraño colocado en el medio de su campo de lavanda a una distancia de unos 90
metros (295 pies).

Se acercó al objeto silenciosamente caminando
a lo largo de un viñedo y
entre unas rocas, mientras lo miraba con cuidado. El
objeto era del tamaño de un automóvil Renault Dauphine (3 a 3,50 metros de
ancho, con unos 2,50 metros de altura), estaba formado como un balón de rugby y
era de un color neutro mate. Tenía una cúpula transparente en la parte superior
y 6 patas montadas sobre un pivote central que se hundían en el suelo, una
reminiscencia de una araña enorme.

Acercándose más al objeto, observó a dos
humanoides pequeños parecidos a
"niños de ocho años de edad" cerca de
1,2 metros de altura (unos 4 pies de altura). Como estaba más curioso que
asustado, él siguió dirigiéndose hacia ellos cuando se dio cuenta que sus
cabezas eran anormalmente grandes en relación a sus cuerpos (aproximadamente
tres veces más grande que una cabeza humana) y su morfología general era
similar a la nuestra, pero obviamente no eran humanos.Estaban en cuclillas examinando algunas
plantas de lavanda cuando por fin uno de los seres descubrió que él venía hacia
ellos a ocho metros (26 pies) de distancia.

Ambos se levantaron y el otro
apuntó hacia Masse algo parecido a un lápiz que lo paralizó, pero al parecer no
perdió la conciencia y fue capaz de seguir observando. El ser luego colocó el
objeto en una bolsa riñonera o pistolera en su lado izquierdo y comenzó a
hablar en un idioma desconocido con su compañero.
Esto permitió que el testigo examinara
cuidadosamente a los seres y la nave mejor mientras permanecía inmovilizado
durante unos minutos. Llevaban un traje de una sola pieza de color gris
verdoso, eran calvos, cabezas como una calabaza, ojos rasgados grandes, piel
blanca, orejas largas y pómulos carnosos y con una pequeña boca circular. Él
recordaba que entonces había una clase de comunicación telepática con estos
seres con un sentido de benevolencia.

Estos dos seres entonces se quedaron por
unos minutos conversando entre
sí, mirándolo la mayor parte del tiempo. Se dio
cuenta que sus ojos se movían y oyó un gorgoteo que seguramente venía de sus
gargantas. Casi no tenían cuello, sus cabezas estaban metidas en sus hombros.
De cuatro a cinco minutos más tarde,
ambos seres avanzaron hacia la nave y entraron por una puerta corrediza. Una
vez dentro, la puerta se cerró automáticamente deslizándose de abajo hacia
arriba. A través de la cúpula transparente, Masse pudo ver a los dos seres
sentados cerca de los controles donde al
parecer lo miraban desde el interior del objeto. Con el silbido de nuevo, la
nave flotó brevemente mientras las 6 patas se volteaban hacia la derecha y se
metieron dentro. Luego la nave despegó hacia el oeste a gran velocidad.
Evidencia de huellas físicas:
Masse permaneció paralizado por unos 15
minutos después de eso, y después de recuperar el movimiento, inspeccionó el
lugar donde el ovni había aterrizado y encontró un cráter profundo y el suelo
estaba muy húmedo a pesar de que no había llovido durante algún tiempo.
En la noche después del encuentro, Masse
y su hija de 18 años volvieron a inspeccionar el lugar de aterrizaje y se
dieron cuenta de que el suelo que estaba una vez muy húmedo, ahora estaba tan
duro como el cemento, en comparación con el suelo circundante que se
derrumbaba
cuando se sostenía en la mano.
Funcionarios del gobierno francés y de
la policía encontraron muescas geométricamente separadas cubriendo el área y
había un área circular amplia de tres metros en el medio de hileras de plantas
de lavanda que parecían decaerse en
proporción a su distancia desde la columna central de la nave. Un análisis
encontró más elevada la cantidad de calcio en el sitio del aterrizaje que en
muestras tomadas de otras áreas del campo.
En todo el perímetro varias plantas de lavanda estaban mal desarrolladas
y de aspecto marchitadas. Masse hizo un intento de replantar en el lugar del
aterrizaje, pero estas plantas también se murieron. Lo más notable de los
rastros de tierra fue que no crecieron plantas de lavanda en el lugar del
aterrizaje durante diez años.
Después del incidente, Masa estaba
constantemente soñoliento y tenía dificultades de mantenerse despierto por más
de cuatro horas a la vez. Durmió 12 a 14 horas en el primer día y luego al día
siguiente durmió casi 24 horas. Fue registrado que él seguía durmiendo de 12 a
15 horas cada noche durante varios meses después del incidente antes de
recuperar sus hábitos de dormir normales.
La investigación:


Además de ser investigado por agencias
del gobierno francés cuando ocurrió, varios investigadores de ovni entrevistó a
Masse (incluyendo el distinguido profesor Jacques Vallée) y concluyeron que
Masse era sincero y un hombre de buen carácter. Vallée declaró:
"Durante estas conversaciones con el
Sr. Masse, tuve la sensación de que estaba en la presencia de un hombre muy inteligente,
capaz de emociones profundas y de pensamientos racionales. También es muy
humilde".
Masse fue considerado absolutamente
confiable por los investigadores de la policía. El teniente coronel Valnet y
Maitre Chautard que dirigían la gendarmería y el alcalde de Valensole, en
realidad cada uno que investigó el caso, concluyó que Maurice Masse estaba
diciendo la verdad.
Un ufólogo famoso francés, Aimé Michel,
visitó a Masse el 8 de agosto de 1965, y al final de la entrevista le enseñó a
Masse un dibujo del ovni de Socorro que Masse lo tomó como su objeto, él dijo: "Alguien ha visto mi ovni".
Michel dijo: "Si el testigo ha inventado esa historia, inventó algo totalmente
coherente con lo que ya sabemos, particularmente consistente con lo que sucedió
el año pasado en los Estados Unidos, en un lugar llamado Socorro" (en
referencia al avistamiento del Oficial Lonnie Zamora, cerca del pueblo de
Socorro, Nuevo México de 1964).

Michel informó que Masse parecía
ansioso, nervioso y angustiado durante la entrevista. Masse dijo de los seres:
"Ellos eran buenos y no deseaban
hacernos ningún daño".
Jimmy Guieu, escritor e investigador
francés, fue a la escena con el deseo de recoger unas muestras de tierra de donde
la nave había aterrizado y se rompió la hoja de su cuchillo ya que el suelo
estaba demasiado duro.
Masse huyó a la costa para evitar la
prensa y los curiosos. Se sintieron los efectos de este avistamiento de ovni y
alienígenas por muchos años después del incidente. Maurice Masse falleció el 14
de mayo de 2004.
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